Por: Ana Dolores Román, Gerente General Pfizer Colombia y Venezuela
Reconocemos que el cambio climático global es uno de los factores de impacto ambiental más relevantes, pues día a día se convierte en una amenaza, que requiere una acción colectiva para mitigar los riesgos potenciales que representa sobre la salud humana. Genera conmoción saber que la crisis climática está cambiando a los niños, robándoles la capacidad de crecer sanos y felices, y en última instancia puede causarles enfermedades, dolencias e incluso la muerte.1
La triple crisis ambiental del cambio climático, la pérdida de naturaleza y la contaminación está comenzando a revertir décadas de avances en el desarrollo en algunos países, y a desacelerar el progreso en otros. De hecho, un medio ambiente saludable es fundamental para garantizar que las personas puedan llevar una vida sana y productiva, y que los recursos públicos y privados se destinen a inversiones para promover el crecimiento sostenible de todas las regiones.
El tiempo se acaba y la naturaleza se encuentra en situación de emergencia, es urgente tomar medidas para abordar estos problemas apremiantes, haciendo que "Una sola Tierra" y su enfoque sobre una vida sostenible en armonía con la naturaleza sean tan pertinentes como siempre. Por esta razón, el Día Mundial del Medio Ambiente, nos permite tomar conciencia sobre la importancia de cuidar y respetar nuestros ecosistemas, bajo el lema «Nuestras tierras. Nuestro futuro. Somos la #GeneraciónRestauración». No podemos retroceder en el tiempo, pero sí podemos hacer crecer los bosques, revitalizar las fuentes de agua y restaurar los suelos. Somos la generación que puede hacer la paz con las tierras, tal como lo señala las Naciones Unidas.2
Resulta primordial, abordar los factores que impulsan la degradación ambiental y la pérdida de la naturaleza para poner fin a la pobreza en un planeta habitable; y prestar una mayor atención para garantizar que la naturaleza se convierta en un motor del desarrollo económico y social. La salud de nuestro medio ambiente impacta en todos, es por esto que, en Pfizer, estamos comprometidos a reducir nuestra huella ambiental. Nuestro propósito empresarial orienta nuestras prioridades ambientales, como, centrarse en la reducción del impacto, la conservación de los recursos y la minimización de los residuos derivados de nuestras operaciones.
La renovación de nuestras oficinas principales en Bogotá incorporó medidas de prevención, mitigación y compensación ambiental, que incluyen acciones para reducir el consumo de energía y del agua, iniciativas para el cuidado de la calidad del aire y la reducción de gases de efecto invernadero. Además, de compensar el impacto ambiental del proyecto de renovación de la sede, con base en la medición de Huella de Carbono, por lo cual, recibimos la certificación de Sello Carbono Neutro, como reconocimiento a nuestro compromiso con la sostenibilidad y Plan Net Zero.
Vale la pena destacar que, en Colombia, hemos implementado un proceso innovador en toda Latino América, que consiste en la transformación de los geles que hacen parte del embalaje en el que se transportan las terapias y vacunas de Pfizer, donde el material del gel es combinado con otros materiales orgánicos, dando como resultado abono que puede ser utilizado para la siembra de plantas y árboles. A esto se suma, el nuevo sistema de reúso de neveras en nuestro proceso de distribución de cadena de frío, con el objetivo de reducir las emisiones de carbono.
Este es un claro ejemplo, de cómo juntos podemos generar un impacto positivo ambiental, y reconocer que esas soluciones escalables, replicables y sostenibles requieren de un trabajo articulado entre todos.